martes, 29 de junio de 2010

El cartero llama dos veces...

Una semana repleta de aniversarios, cumpleaños, conmemoraciones y otras festividades. Al margen de los homenajes que hemos realizado en el cara-libro (o fesibuk) hay otros temas candentes en el tapete de nuestra porteña actualidad.
Uno de ellos, y si han leído el post anterior, es el casamiento entre personas del mismo género. Siendo una murga de hombres (en cuanto al canto) es que queremos que se respeten nuestro derechos como tales, como hombres a elegir. En nuestro caso, por lo menos que sea de mi conocimiento, no hay ningún integrante gay. Eso no quita que aboguemos por sus derechos.

Dentro de este orden de ideas, ayer escuché la lectura de una carta que le enviaron a los senadores. El remitente era un joven de 16 años, cuayo padre adoptivo es homosxual. Les dejo la carta para que la lean y sigan pensando.
Salú salú!

"Sres. Senadores:

Mi nombre es Daniel Lezana, soy hijo de Luis Lezana, tengo 16 años y nos adoptamos hace seis, por eso ahora puedo llevar nuestro apellido.

El martes 8 de junio, estuve con mi papá en el Senado, escuchando las distintas opiniones, entonces yo, también quiero dar mi opinión.

Yo no divido a la gente por su sexualidad, heteros, homos, travestis... y demás, posibilidades.

Mis padres biológicos eran heterosexuales y por esas cosas de la vida, con mi hermanito, terminamos viviendo en un hogar (no quiero hablar del por qué).

Cuatro veces más, intentaron adoptarme, familias heterosexuales, y me devolvieron, porque decían que era travieso, una vez me devolvieron por que les puse mucha comida a los pececitos y se murieron, al parecer por comer mucho. Y las otras veces no recuerdo bien, sólo tenía más o menos 8 añitos.

Con todo esto, yo no digo que todos los heteros son malos, es más, yo soy hetero, me gustan las chicas y soy buena persona.

A los 10 años, apareció en el hogar Luis, mi papá del alma, como nos llamamos nosotros. Entonces el juez me dijo: "Mirá Dani , hay un Sr. soltero, que tiene un perro grande que se llama Carolo, y quiere adoptarte". Yo no lo podía creer, había una nueva esperanza para mí, yo pensaba que iba a terminar en el hogar como muchos de los chicos grandes. Ya a mi hermanito lo habían adoptado por que era muy chiquito, el si había tenido suerte... y yo, ya era grande, ¿por qué nadie me quería?... todas las noches me lo preguntaba, hasta que me dormía, sin respuestas...

Y así fue que nos vinimos a Buenos Aires. Al principio no fue fácil, Luis es arquitecto, así que la casa siempre es un lío, siempre esta remodelando algo, no tiene descanso... jajaja. Luis es re hincha, todo el día está diciendo: ¿estudiaste?, ¿te bañaste?, ¿te lavaste los dientes... ¡¡Ufa digo yo!!, ya estoy harto... pero, cuando me voy a dormir por las noches, sé que él siempre sube a taparme y a darme un beso en la frente, qué molesto... ¿no? jajaja.

Cuando pasó el tiempo y me animé a hablar con mi viejo de lo que es la homosexualidad, al principio, no me gustó, pero porque no lo entendía. A ustedes señores senadores, les debe pasar lo mismo ¿no...? ¿Ustedes entienden con el corazón lo que es ser gay?

Después con el tiempo, empecé a ver con mis ojos del corazón a Luis y Gustavo (su ex pareja, ahora se separaron)... también soy hijo de padres separados... ojo con mis traumas... jajaja. A mí, me hubiera gustado que Luis y Gustavo se casen, hubiera tenido dos papás.

Cuando vivíamos los cinco (había dos perros), todo era más divertido. Luis (mi viejo) era el malo y nosotros éramos sus víctimas... jajaja... era muy divertido, todos estábamos en su contra, él siempre tiene que organizar todo.

Según Luis (y yo me río mucho) tiene que ser madre y padre a la vez...¡es un personaje! A todos los hijos que se crían sólo con un papá o una mamá, les pasa lo mismo ¿no?, sus papas cumplen los dos roles, el mío lo hace y a veces, es re pesado.

Nosotros somos una familia, les guste o no a muchos, esta es mi familia.

Para los que piensan o creen que mi viejo me inculca el ser gay o me puede contagiar, ¡se equivocan! A mí me gustan las chicas y ¡mucho!, pero ¿qué pasa si fuera gay?, ustedes creen que es por que me crío un gay... mmm... yo no lo creo. Ahora que estoy escribiendo por los derechos de mi viejo y los míos, quisiera, que él se casara. Como me voy a casar yo el día de mañana.

Él, cuando se case, lo va hacer con otro gay, que sienta como él. No se va a casar con los heteros, ¿de qué tienen miedo?, ¿qué los gays son una plaga que nos van a invadir?, Si se casa mi papá, el boletín de la escuela lo van a poder firmar los dos, a las reuniones del colegio puede venir cualquiera de ellos. Quiero tener los mismos derechos que tienen mis compañeros del colegio, y si ellos (mis papás), se separan, tener los mismos derechos, que tienen los hijos de padres separados... sus hijos los tienen y yo no, ¿por qué?

Bueno, lo último, yo estoy orgulloso del padre que tengo, de él aprendo que en la vida hay que luchar por las cosas que queremos, y yo querido viejo , siempre estaré a tu lado.

Y por favor señores senadores, los gays se van a casar entre ellos, no tengan miedo, no se van a casar con ustedes.

Muchas gracias.

Daniel Lezana"

Les dejo la fuente. Si quieren, pueden ir a esta otra fuente.

martes, 22 de junio de 2010

"No somos raros, vení no te asustés..."

Les dejo un texto que me llegó a mi casilla personal y que me ha parecido muy interesante. Por lo menos como para pensarlo.
Espero que les ayude a reflexionar (si así lo quieren).
Un abrazo y nos seguimos leyedo!!


Estoy completamente a favor del permitir el matrimonio entre católicos. Me parece una injusticia y un error tratar de impedírselo.

El catolicismo no es una enfermedad. Los católicos, pese a que a muchos no les gusten o les parezcan extraños, son personas normales y deben poseer los mismos derechos que los demás, como si fueran, por ejemplo, informáticos u homosexuales.

Soy consciente de que muchos comportamientos y rasgos de caracter de las personas católicas, como su actitud casi enfermiza hacia el sexo, pueden parecernos extraños a los demás. Sé que incluso, a veces, podrían esgrimirse argumentos de salubridad pública, como su peligroso y deliberado rechazo a los preservativos. Sé también que muchas de sus costumbres, como la exhibición pública de imágenes de torturados, pueden incomodar a algunos.

Pero esto, además de ser más una imagen mediática que una realidad, no es razón para impedirles el ejercicio
del matrimonio.

Algunos podrían argumentar que un matrimonio entre católicos no es un matrimonio real, porque para ellos es un ritual y un precepto religioso ante su dios, en lugar de una unión entre dos personas. También, dado que los hijos fuera del matrimonio están gravemente condenados por la iglesia, algunos podrían considerar que permitir que los católicos se casen incrementará el número de matrimonios por "el qué dirán" o por la simple búsqueda de sexo (prohibido por su religión fuera del matrimonio), incrementando con ello la violencia en el hogar y las familias desestrucuturadas. Pero hay que recordar que esto no es algo que ocurra sólo en las familas católicas y que, dado que no podemos meternos en la cabeza de los demás, no debemos juzgar sus motivaciones.

Por otro lado, el decir que eso no es matrimonio y que debería ser llamado de otra forma, no es más que una forma un tanto ruín de desviar el debate a cuestiones semánticas que no vienen al caso: Aunque sea entre católicos, un matrimonio es un matrimonio, y una familia es una familia.

Y con esta alusión a la familia paso a otro tema candente del que mi opinión, espero, no resulte demasiado radical: También estoy a favor de permitir que los católicos adopten hijos.

Algunos se escandalizarán ante una afirmación de este tipo. Es probable que alguno responda con exclamaciones del tipo de "¿Católicos adoptando hijos? ¡Esos niños podrían hacerse católicos!".

Veo ese tipo de críticas y respondo: Si bién es cierto que los hijos de católicos tienen mucha mayor problabilidad de convertirse a su vez en católicos (al contrario que, por ejemplo, ocurre en la informática o la homosexualidad), ya he argumentado antes que los católicos son personas como los demás.

Pese a las opiniones de algunos y a los indicios, no hay pruebas evidentes de que unos padres católicos
estén peor preparados para educar a un hijo, ni de que el ambiente religiosamente sesgado de un hogar católico sea una influencia negativa para el niño. Además, los tribunales de adopción juzgan cada caso individualmente, y es precisamente su labor determinar la idoneidad de los padres.

En definitiva, y pese a las opiniones de algunos sectores, creo que debería permitirseles también a los católicos tanto el matrimonio como la adopción.

Exactamente igual que a los informáticos y a los homosexuales.

domingo, 20 de junio de 2010

¡Viejo son los trapos!

Muchos están y otros tantos se han ido. Algunos lo serán y otros lo somos. Cualquiera sea el caso del ocasional lector de éstas líneas, esperemos que lo hayan pasado lindo. Feliz día del Padre.
Saludos y nos seguimos leyendo



PD: Como redactor, les dejo un videíto de un cantor de tango que le gustaba a mi viejo. Es sólo un recuerdo imborrable en mi corazón, canción que suena con el viento de cada esquina... Salú!




miércoles, 16 de junio de 2010

La memoria no es tangible pero si es selectiva. Muchas veces esa selección no nos permite realizar reflexiones profundas o interesantes, pero por suerte esto no siempre es así. La Selección Argentina a demostrado su apoyo incondicional a las Abuelas de Plaza de Mayo tanto a nivel individual como a nivel grupal. Una demostración de ello fue sellada en una foto que no se vió en muchos medios, pero que existió, y si están leyendo esto, la pueden ver.

En el día de la fecha, y contrariamente a lo referido en un mail que recibimos, el apoyo también salió en uno de los medios del grupete (Olé, chiva calenchu). Sin embargo este mini espacio de reflexión es para pedirles el apoyo de todos ustedes (argentino y uruguayos en su gran mayoría) para que se tomen cinco minutos para firmar la propuesta de las Abuelas como premio Nobel de la Paz. Eventualmente pueden sugerirle a algún amigo o amiga para que lo hagan visitando la página que les decía o incluso en la misma página web de Abuelas o uniéndose al grupo en el Feisbuck.
Les dejo un saludo mundialista. Nos seguimos leyendo!!

lunes, 14 de junio de 2010

Muchas cosas se han dicho y se dirán acerca de la actuación de Maradona ante los ingleses. Lo cierto es que más allá de la "mano de Dios" y el mejor gol de todos los mundiales, el tipo era humano. Una demostración de ello es el partido que jugaron Inglaterra y Argentina en Wembley en 1980. Allí hubo una jugada parecida (no igual) a la legendaria gambeta del barrilete cósmico. Fue el hermano de él, Lalo, quien le reprocho la jugada "¡Tenías que gambetear al arquero!" Y eso fue lo que hizo en el `86. Les dejo el compilado del partido. No tiene desperdicio (igual la jugada pasa antes del minuto).
Espero que les guste, y les dejo una estrofa del tango Naranjo en flor para que la piensen:
Primero hay que saber sufrir,
después amar, después partir
y al fin andar sin pensamiento...
Nos seguimos leyendo!!


viernes, 11 de junio de 2010

Porque ya es hora...


Sí. Llegó. EL evento que le dará de comer a todas las murgas llegó. Más allá de Shakira y su "Waka-Waka" que ya me tiene podrido, hoy empieza el mundial. Ya empezó (están 0-0 Sudáfrica y México) pero nuestros ojos están en los colores celeste y blanco. Tanto del Uruguay como en la Argentina.
Los de Tabares se la juegan hoy con los Franchutes (acordate de este otario... le van a cobrar la manito de Henry... vos acordate) y no será simple. Confiamos en los muchachos y les damos nuestro apoyo desde acá.
Mañana la Argentina del D10S de los argentos se las va a ver negras (nunca dicho, no?), pero confiamos en que se puede ganar. Eso sí, no tiren el achique muchachos...
Lo cierto, y apelando a la cábala como elemento de creación de mitos, es que la Argentina juega en el estadio en donde a los Pumas los bautizaron como tales. En 1965 el Ellis Park fue testigo de una gran victoria del rugby argentino y esperamos que el 2010 también lo encuentre como testigo de una victoria. Ya pasaron 45 años, pero quien te dice. Fue un 19 de junio, mañana es 12. Quizás, quizás, quizás...

Nos seguimos leyendo!!